La tendencia de las sillas desparejadas alrededor de la mesa del comedor o la cocina es una tendencia que llegó hace unos años para quedarse.

Los comedores con sillas distintas tienen siempre ese puntito ecléctico y atrevido que nos encanta. Por desgracia fuimos educados en eso de que las ‘cosas tenían que hacer juego’ para que hubiera equilibrio y fueran de buen gusto y tanto en moda como en decoración diseñadores e interioristas han sabido demostrarnos que lo desparejado también es bello y también puede ser armónico y equilibrado.

Esta mesa no tiene nada de estridente a pesar de las sillas diferentes, al contrario, es increíblemente inspiradora y cálida y a todos nos gustaría sentarnos ahí, porque tiene algo de informal, desenfadado y cómodo que un set de sillas iguales probablemente no tendría.

Los modelos de las sillas en concreto son: en los extremos, con brazos y en negro la silla 7 de Arne Jacobsen, y la Ant también de Arne Jacobsen en blanco, 3 sillas Eames DSW en blanco y 3 sillas más, una en blanco y dos en negro de corte más clásico, que no he conseguido encontrar, pueden provenir de mercados de pulgas, haber sido hechas a mano por carpinteros nórdicos, etc.

Es una tendencia que me encanta y está en el top de mis cambios futuros cuando renueve el comedor de casa ¿os gusta a vosotros?